Vamos a celebrar que
hoy es viernes y que empieza el fin de semana con una historia de esas que nos
gustan a todos, una leyenda macabra sobre un palacete murciano en plena zona de
las tascas.
Hasta 1832 en la
actual calle Siervas de Jesús, anteriormente conocida como de los Descabezados,
existía una casa solariega construida con robustos sillares y un gran pórtico,
llamada Palacio
de los Descabezados. Una casa que pertenecía a la familia de los
Guzmanes.
Una desagradable historia de amor, pasión, asesinato y venganza que dio
nombre a este palacete y también a la calle donde estaba situado, además de
originar una terrible leyenda que desde entonces corre de boca en boca por las
calles de Murcia.
Cuenta esta leyenda
que en época del rey Alfonso X el Sabio, tras la conquista de Murcia, el dueño de este palacio entró en un convento cercano y
raptó con gran violencia a una joven y hermosa novicia.
Las monjas, una vez
repuestas de tremendo susto, corrieron a informar al rey del secuestro y
pedirle ayuda. Le contaron que el caballero Guzmán se había llevado a la fuerza
a la joven novicia y la retenía en la torre del palacete.
El soberano mandó
inmediatamente a sus tropas al palacio a rescatar a la novicia y detener al
caballero.
Guzmán se hizo fuerte
en su palacio y luchó cuanto pudo para evitar ser detenido por las tropas del rey,
hasta que llegó un momento que se vio acorralado y se dio cuenta que sería
imposible escapar.
En ese momento, lleno
de odio y rabia se fue hasta la muchacha, sacó su espada y le cortó la cabeza, arrojándola a continuación por
la ventana.
Pero no termina aquí
la leyenda, porque en el mismo instante que arrojaba la cabeza por la ventana
unas espantosas llamas y un humo negro que
parecían salir del mismísimo infierno envolvieron al asesino hasta hacerlo
desaparecer.
Los soldados, cuando
consiguieron reponerse de la tragedia que habían contemplado, registraron todo
el palacio pero no hallaron a nadie, ni al asesino y a sus dos hijos varones. El
rey al no encontrar a quien condenar por el crimen mandó desterrar a la familia
y servidumbre del asesino y además ordenó decapitar
como pública advertencia las dos estatuas de la fachada principal del palacete
que parece ser representaban a los dos hijos de Guzmán.
Dibujo realizado de la Casa de los Descabezados por el arqueólogo Ivo de la Cortina |
La casa estuvo en pie
hasta 1832, año en que fue demolida, aunque la leyenda asegura que nunca volvió
a ser habitada. Realidad, ficción ¿Quién sabe?
Muchas gracias por
estar ahí y por supuesto nos vemos por Murcia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por tu comentario. Me encanta recibirlos y por supuesto en cuanto pueda te respondo.